
Éxito total para la nueva aventura de Andrzej Bargiel, nuevo miembro del equipo Ferrino, que subió y bajó con esquís los ochomiles del Gasherbrum I y el Gasherbrum II.
La colaboración entre Ferrino y su nuevo embajador Andrzej Bargiel, escalador y esquiador extremo, heredero de la gran tradición del alpinismo polaco, que fue noticia en 2018 al convertirse en el primer hombre del mundo en descender esquiando desde la cima del K2, ha comenzado de la mejor manera posible.
En las últimas semanas, de hecho, Andrzej, acompañado por sus compañeros Janusz Gołąb, Maciej Sulima y Bartek Pawlikowski, ha escrito un nuevo capítulo en su ambicioso proyecto "Hic Sunt Leones", que pretende completar el ascenso sin el uso de oxígeno suplementario y el descenso con esquís de los 14 picos más altos del planeta.
El proyecto, que comenzó en 2013, ya le ha permitido completar ascensos y descensos récord de Shisha Pangma, Makalu, Broad Peak y, por supuesto, el K2.
Esta vez el objetivo eran los picos “gemelos” de los Gasherbrums, dos de los picos más altos de la cordillera del Karakórum.
Después de la larga aproximación al glaciar Baltoro en Pakistán y la primera ascensión de aclimatación del Khosar Gang de 6.401 metros, la expedición abordó el Gasherbrum II (8.035 m), que Andrzej escaló y esquió el 19 de julio.
Diez días después, llegó el turno del Gasherbrum I (8080 m). Tras completar el ascenso nocturno desde el Campo 2, Andrzej alcanzó la cima a las 7:15 del 26 de julio y comenzó su descenso desde allí.
La expedición al GI y GII representa otro paso fundamental hacia la realización del gran sueño que persigue Bargiel, aprovechando ahora también el apoyo del mejor equipamiento puesto a disposición por Ferrino, como la mochila Instinct , que ofrece un compromiso ideal entre ligereza, capacidad y tecnicidad y ya ha sido apreciada por muchos apasionados del esquí empinado por el confort que consigue ofrecer incluso en las fases delicadas del descenso.
“Estamos muy contentos con esta nueva y hermosa aventura de Andrzej y sus compañeros —comenta Anna Ferrino, CEO de Ferrino—. Es un proyecto ambicioso e innovador, digno de la gran escuela de montañismo en la que creció y con la que nuestra empresa ha tenido el honor de colaborar desde los años 90, junto con Krzystof Wielicki, y posteriormente en las expediciones polacas al K2 en 2017, 2018 y 2020. Colaborar con los mejores escaladores del mundo para empresas de este calibre nos brinda la oportunidad de probar nuestros productos en las condiciones más extremas, obteniendo confirmaciones, pero también nuevos estímulos y sugerencias para la mejora constante del rendimiento y los estándares de calidad, al servicio de todos los entusiastas de la montaña”.